
Secuestrada por el hampa y sujeta a la enorme corrupción de los cuerpos policíacos, Ciudad Gótica se convirtió en la metrópolis más sangrienta del País.
Los asesinatos estaban a la orden del día, sin que las autoridades encargadas de la seguridad pudiesen hacer algo.
Los residentes confiaban en que Batman, el Hombre Murciélago, junto a uno que otro policía honesto, lograsen cambiar la situación en la ciudad.
Por ello, este puñado de hombres empezaron dar fuertes golpes a los maleantes.
En un solo día, lograron decomisar varios millones de dólares al crimen organizado, además de asegurar importantes cantidades de droga y arrestar a cientos de sospechosos, quienes fueron encarcelados y enviados ante la justicia.
Como era de esperarse, la respuesta de los criminales fue dura.
Un ser maligno y oscuro, conocido con el apodo de ‘Guasón’, reunió a los líderes más importantes de la mafia local y les propuso una solución impensable: terminar con el Caballero de la Noche.
Por supuesto, los mafiosos se rieron de él. Tomaron sus respectivos cuerpos y trataron de salir de la reunión.
Cuál fue su sorpresa cuando, granada en mano y sonrisa en boca, el ‘Guasón’ los obligó a escucharlo detenidamente y pactar con él.
“Ciudad Gótica requiere de un nuevo tipo de maleante, y yo se los voy a dar. La gente se va a comer a sí misma”, les comentó.
El primer paso de la delincuencia fue contundente: o Batman dejaba de luchar en su contra o una persona inocente moriría a diario.
Y la amenaza se cumplió.
Por las calles de Ciudad Gótica, los cuerpos empezaron a aparecer, cuyas bárbaras imágenes eran mostradas en los medios de comunicación.
La opinión pública culpó entonces a quienes se suponía estaban para defenderlos.
Mientras tanto, el ‘Guasón’ le cuestionaba irónicamente a través de la televisión al gobernante local, quien días atrás bromeó con empresarios y funcionarios en eventos públicos: “¿Por qué tan serio?”
Las autoridades se limitaban a responder: “La noche siempre es más oscura antes del amanecer, pero el sol saldrá pronto”.
Sin embargo, por más que trataban de bajar la presión y aumentar la confianza popular, los residentes se negaban a admitir las declaraciones oficiales, ya que la “noche” se veía ya eterna, pues el Astro Rey no tenía visos de surgir por oriente.
Agobiado por la sangre derramada y la pena interior, el Hombre Murciélago trató de darse por vencido.
Su protector y consejero, el viejo Alfred, lo convenció de no hacerlo.
“Usted cruzó la frontera primero”, le advirtió.
“Algunos hombres buscan algo lógico: dinero o poder, otros sólo quieren ver al mundo quemarse. Ciudad Gótica lo necesita”, continuó el anciano, logrando su cometido.
Dispuesto a olvidar de manera momentánea sobre la terrible realidad, Batman se refugió en un restaurant de la localidad, a donde acudió acompañado por una hermosa mujer.
De lejos, otro comensal empezó a ver con ojos pasionales a la bella acompañante.
Entrado en copas, el Súper Héroe trata de reclamar al varón y se levanta de su mesa, pero por su inconveniente estado, cae de nalgas, causando la carcajada de los presentes.
Los asesinatos estaban a la orden del día, sin que las autoridades encargadas de la seguridad pudiesen hacer algo.
Los residentes confiaban en que Batman, el Hombre Murciélago, junto a uno que otro policía honesto, lograsen cambiar la situación en la ciudad.
Por ello, este puñado de hombres empezaron dar fuertes golpes a los maleantes.
En un solo día, lograron decomisar varios millones de dólares al crimen organizado, además de asegurar importantes cantidades de droga y arrestar a cientos de sospechosos, quienes fueron encarcelados y enviados ante la justicia.
Como era de esperarse, la respuesta de los criminales fue dura.
Un ser maligno y oscuro, conocido con el apodo de ‘Guasón’, reunió a los líderes más importantes de la mafia local y les propuso una solución impensable: terminar con el Caballero de la Noche.
Por supuesto, los mafiosos se rieron de él. Tomaron sus respectivos cuerpos y trataron de salir de la reunión.
Cuál fue su sorpresa cuando, granada en mano y sonrisa en boca, el ‘Guasón’ los obligó a escucharlo detenidamente y pactar con él.
“Ciudad Gótica requiere de un nuevo tipo de maleante, y yo se los voy a dar. La gente se va a comer a sí misma”, les comentó.
El primer paso de la delincuencia fue contundente: o Batman dejaba de luchar en su contra o una persona inocente moriría a diario.
Y la amenaza se cumplió.
Por las calles de Ciudad Gótica, los cuerpos empezaron a aparecer, cuyas bárbaras imágenes eran mostradas en los medios de comunicación.
La opinión pública culpó entonces a quienes se suponía estaban para defenderlos.
Mientras tanto, el ‘Guasón’ le cuestionaba irónicamente a través de la televisión al gobernante local, quien días atrás bromeó con empresarios y funcionarios en eventos públicos: “¿Por qué tan serio?”
Las autoridades se limitaban a responder: “La noche siempre es más oscura antes del amanecer, pero el sol saldrá pronto”.
Sin embargo, por más que trataban de bajar la presión y aumentar la confianza popular, los residentes se negaban a admitir las declaraciones oficiales, ya que la “noche” se veía ya eterna, pues el Astro Rey no tenía visos de surgir por oriente.
Agobiado por la sangre derramada y la pena interior, el Hombre Murciélago trató de darse por vencido.
Su protector y consejero, el viejo Alfred, lo convenció de no hacerlo.
“Usted cruzó la frontera primero”, le advirtió.
“Algunos hombres buscan algo lógico: dinero o poder, otros sólo quieren ver al mundo quemarse. Ciudad Gótica lo necesita”, continuó el anciano, logrando su cometido.
Dispuesto a olvidar de manera momentánea sobre la terrible realidad, Batman se refugió en un restaurant de la localidad, a donde acudió acompañado por una hermosa mujer.
De lejos, otro comensal empezó a ver con ojos pasionales a la bella acompañante.
Entrado en copas, el Súper Héroe trata de reclamar al varón y se levanta de su mesa, pero por su inconveniente estado, cae de nalgas, causando la carcajada de los presentes.
Esto provocó un enorme enojo en el Hombre Murciélago, quien arremetió contra los huéspedes.
Inmediatamente sale del lugar, para evitar que la policía lo capture, aunque el asunto poco a poco empezó a trascender entre la población.
Inmediatamente sale del lugar, para evitar que la policía lo capture, aunque el asunto poco a poco empezó a trascender entre la población.
En las páginas de los diarios, los caricaturistas dibujaron con pinceladas de humor y sarcasmo respecto a lo ocurrido.
Despues del incidente y para evitar mayores críticas, surgió la idea de lanzar como chivo expiatorio a un policía de menor rango, quien aceptó estoicamente su sacrificio para poner punto final al incidente.
A pesar de la intención de limpiar la imagen del Súper Héroe, los ciudadanos no se tragaron el anzuelo y siguieron dudando de lo que realmente había ocurrido.
El plan del ‘Guasón’ parecía haber funcionado: los ‘buenos’ ahora parecían peores que los mismos delincuentes.
Todo estaba listo para que los policías honestos mostraran su verdadero rostro y se fusionaran con el crimen organizado.
La única solución era terminar con los hasta ahora honestos policías para dejar el paso a nuevas personalidades que pudiesen continuar con la buena labor realizada hasta el momento.
La decisión dependía de las máximas autoridades.
La historia continuará.
Batman tras las rejas…
El actor Christian Bale, quien interpreta a ‘Batman’, fue enviado a la cárcel londinense durante el fin de semana por haber golpeado a dos miembros de su familia.
Luego del pago de una fianza, quedó en libertad, aunque su proceso sigue pendiente.
¿Podrá al fiscal bajacaliforniano enviar a prisión al verdadero sospechoso de haber realizado un disparo en el Restaurante Pampas do Brasil?
Aunque usurpador del poder, el responsable de enviar ante la justicia al culpable es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.
Despues del incidente y para evitar mayores críticas, surgió la idea de lanzar como chivo expiatorio a un policía de menor rango, quien aceptó estoicamente su sacrificio para poner punto final al incidente.
A pesar de la intención de limpiar la imagen del Súper Héroe, los ciudadanos no se tragaron el anzuelo y siguieron dudando de lo que realmente había ocurrido.
El plan del ‘Guasón’ parecía haber funcionado: los ‘buenos’ ahora parecían peores que los mismos delincuentes.
Todo estaba listo para que los policías honestos mostraran su verdadero rostro y se fusionaran con el crimen organizado.
La única solución era terminar con los hasta ahora honestos policías para dejar el paso a nuevas personalidades que pudiesen continuar con la buena labor realizada hasta el momento.
La decisión dependía de las máximas autoridades.
La historia continuará.
Batman tras las rejas…
El actor Christian Bale, quien interpreta a ‘Batman’, fue enviado a la cárcel londinense durante el fin de semana por haber golpeado a dos miembros de su familia.
Luego del pago de una fianza, quedó en libertad, aunque su proceso sigue pendiente.
¿Podrá al fiscal bajacaliforniano enviar a prisión al verdadero sospechoso de haber realizado un disparo en el Restaurante Pampas do Brasil?
Aunque usurpador del poder, el responsable de enviar ante la justicia al culpable es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.